Triasio, Atenas, c. 268-265 a. de C.

Crates, hijo de Antígenes, fue natural de Triasio, discípulo y amigo de Polemón, que le sucedió en la Academia, sobre el 260 a. de C. Tanto se favorecieron mutuamente, que no sólo en vida hicieron unos mismos estudios, sino que también fueron semejantes hasta el postrer aliento, y aun después de muertos tuvieron un mismo sepulcro. Así que Atenágoras cantó de los dos en esta forma:

«Refiere, oh caminante que transitas,
cómo en este sepulcro
Crates el santo y Polemón descansan;
magnánimos varones y concordes,
de cuyos labios y divinas bocas
sacras palabras fluyen…».

Arcesilao dijo de ellos que «eran como dioses, o reliquias del siglo de oro». En nada eran vulgares, y la gravedad de sus tonos nunca se había escuchado antes.
Cuando murió Crates, según escribe Apolodoro en el libro III de las Crónicas, dejó varios libros, unos filosóficos, otros acerca de la comedia, y otros de disertaciones al pueblo y de embajadas. Tuvo discípulos muy nombrados, como Arcesilao, Bión Boristenita y finalmente Teodoro, de quien tomó nombre la escuela teodórica.

Extraído de Vida de filósofos ilustres

admin

Share
Publicado por
admin

Entradas recientes

El I Ching

El clima de desconcierto espiritual que caracteriza la Era Contemporánea, unido a una fuerte atracción…

3 meses ago

El concepto de Oikos en la Antigüedad

Para estudiar el mundo antiguo es necesario profundizar algunos conceptos que marcaban el proceder del…

4 meses ago

Ciencia y dignidad

Con un título tan lacónico voy a juntar en un mismo vaso dos líquidos inmiscibles,…

4 meses ago

El Jardín de las Delicias

Grande habrá sido la impresión del rey Felipe II cuando vio por primera vez la…

11 meses ago

El saber científico y el saber filosófico

“2:9 Dios el Señor hizo que creciera toda clase de árboles hermosos, los cuales daban…

1 año ago

Reflexiones sobre la complejidad

El premio Nobel, Ilya Prigogine, hacía la siguiente afirmación: “la naturaleza del universo es de…

1 año ago